No es una cantante de pop bonita y blanca: Es Fantastic Negrito

Por: Estefanía Romero Foto: Melisa Rodríguez

Sólo existe un Fantastic Negrito en el mundo y esta es la entrevista que tuve con el artista que está llevando las raíces de la música afroamericana hacia otro nivel. ¡Disfruten!

 

-Hoy la música popular es hip hop, pero tú decidiste irte al inicio de todo: el blues, los spirituals, las work songs.

-¡Sí!

-¿Por qué?

-Es una muy buena pregunta. Cuando era un hombre joven, en mis 20, yo buscaba qué tipo de música podría funcionarme. Quería ser famoso, tener los mejores coches, las mejores mujeres, las mejores drogas, la mejor ropa. Buscaba todo lo que pudiese obtener de la música y de repente tuve un accidente.

Perdí mi mano. Esto inició la segunda parte de mi vida, cuando me dirigí a lo underground de la música y creé muchas encarnaciones. Conocí a la gente del rock en español, a la gente del afro punk; yo no sabía nada de estas cosas. Después vino un periodo en que sentí que ya no tenía nada que decir en la música. Cuando tocaba no sentía nada. Entonces vendí todo mi equipo y me mudé de nuevo a Oakland, California, porque en ese entonces vivía en Los Ángeles; y decidí convertirme en un agricultor de marihuana.

Hice eso por cinco años, nada de música. De repente, un día la música me inspiró de nuevo, decidí que esta vez quería cavar profundo, recordar a mi abuela y sus ancestros; cuando yo solía ir a su granja; cuando era niño y sentía algo. No lo comprendía, pero sentía algo profundo. Comencé a profundizar en ello y en verdad redescubrí a Robert Johnson, Skip James, Son House; toda esta música increíble que me inspiró a convertirme en Fantastic Negrito.

Y pensé: ahora quiero contribuir a la música, más de lo que puedo obtener de ella. Cuando tomé esa decisión, me puso en la dirección a contribuir de vuelta a las raíces, el comienzo, el origen. El poder de esto realmente me inspiró, por eso lo elegí. Y, enfrentémoslo, no soy la mujer bonita blanca que canta su música pop, no soy un rapero, entonces dije: tan solo quiero ser yo mismo, no quiero ser nada más. Y lo decidí: no ir a una disquera que me pueda decir “no lo sé. ¿Entras en mis fantasías reprimidas? ¿En la fantasía de todos? Deberías lucir de esta manera. Tú, hombre negro, debes lucir así…”. Y no quise hablar con esa gente porque me hacen sentir ganas de poner una pistola en mi cabeza.

Levanté mi guitarra hace cinco años y le dije a la gente: soy Fantastic Negrito. Ellos reaccionaron con un “¡¿qué?! ¿Qué es eso?!”. Mucha gente no lo entiende y dicen “no, eso no es bueno, porque nosotros, la gente blanca, no queremos decir ‘Negrito’, nos hace sentir incómodos”. Y pensé: ¿te hace sentir incómodo? ¡Eso es perfecto! Esa es la persona que quiero ser, me gusta.

Pensé: si te hace sentir incómodo es porque no conoces a los latinos, porque esa palabra ha estado en mi cabeza desde que soy un niño. Crecí con mexicanos y salvadoreños, y siempre escuché la canción que va “ahhhh, Negrito! Dum dum dum dum. Siempre escuché eso y no suena como “pinche negrito”, suena hermoso. La gente debería conocer a estos latinos porque la mayoría de California es latina. Si no creciste con latinos, no me veas a mí. Yo crecí con ellos, yo me siento cómodo, ellos son mis hermanos y mis hermanas, y conozco un poco de su lenguaje, un poco de su cultura.

   

Yo voy a las calles y quiero tocar para la gente que no quiere escuchar mi canción, esa es mi audiencia perfecta. Porque si voy con mis amigos ellos dirán “hey, eso está cool, ten un trago”. Si voy a una disquera, tendré a esa persona sentada ahí con el poder, y ellos tienen fantasías horribles sobre quién deberías ser.

Esta es mi respuesta larga a por qué decidí dedicarme a esto. Soy un hombre en su mediana edad, soy libre, puedo hacer lo que quiera. Quiero tocar para la gente que sale del tren, esa es mi gente. Ellos trabajan duro, tienen tres empleos en Estados Unidos, el mejor país del mundo, ¿cierto? Pero trabajas tres empleos para pagar tus cuentas, ¿dónde está la igualdad? Quiero escribir estas canciones de folk, así es como empecé.

 

 

-Siempre mencionas de alguna manera estos valores: la libertad, ser humilde. Dijiste alguna vez “no me importa haber ganado el Grammy, está bien, pero en realidad se trata de la música”.

-Nunca pensé en los Grammy. Debo serte honesto, yo sólo quiero tocar mi guitarra en la calle. Ellos me nominaron al Mejor Álbum de Blues Contemporáneo, y eso me sorprendió. Pensé: ok, supongo que puedo ir a los Grammy. Y la gente ahí me decía: “¡Felicidades! ¿Con quién firmaste?”, y yo respondía: “yo no firmo con nadie, soy un chico saliendo de la calle, asistiendo a tu institución Grammy, así que no creo que vaya a ganar por primera vez.

Pero ahora le doy crédito a esta gente, quizás querían algo fresco. Estoy haciendo algo que está completamente al revés. Si tú eres un purista y amas el blues puro, tal vez me vas a odiar. Pero creo que ellos no quieren que yo toque el mismo maldito blues de siempre, las letras que en 1930… (comenzó a cantar: ) “me robaste a mi mujer, me siento muy mal”, sí. Pero esto es el 2019, es un blues diferente; yo no quiero repetir el mismo blues aburrido que tanto escuché.

Así que esto fue significativo. Los Grammy, nunca pienso en ellos, nunca pensé en ellos, fui feliz de obtenerlo, luego lo guardé por ahí; jamás lo veo, porque para mí no se trata de eso. Tienes que hacer música que te haga sentir incómodo. Amo esta música que me hace decir: Wow! Y ver alrededor.

 

 

-Tú prefieres ser un cantautor que ser un músico.

-¡Oh! Cien por ciento. No soy un músico. Un músico se sienta por horas (comenzó a cantar: ) “budubadabadabudu…”. Yo no disfruto eso. Mi disfrute viene de ser un artista, de ser un creador.  Pude haber sido un bailarín, un pintor, pudo ser divertido; pero me sucedió que la música fue el medio.

-Cuando eras niño tus padres no te permitían escuchar música popular. Todo el tiempo podías escuchar a Louis Armstrong. ¿Por qué hicieron eso?

-Mis padres son muy religiosos. Mi padre era un musulmán devoto. Ellos realmente no me expusieron a la música popular, a la cultura popular; me aislaron tanto que cuando cumplí 12 años huí. Nunca volví a casa, así que nunca vi a mi padre de nuevo y luego él falleció. Eso es un problema: no aísles a los niños. ¿Sabes? Porque eso fue lo que pasó. Me escondieron algo y yo quería verlo: “¿qué es? ¿Qué es? ¿Qué es?”. Me apartaron y no lo recomiendo porque eso me llevó a las calles.

-¿Y cómo te fue a partir de eso?

-Mírame ahora. ¿Tú qué piensas?

-¡Creciste muy bien!

-Bueno, yo no recomiendo a ningún niño de 12 años hacerlo. Creo que mi padre era muy viejo y mi madre muy joven. Mi padre tenía 33 años más que mi mamá, así que era una casa muy interesante. Él era de otro mundo, otro tiempo. Creo que él intentaba prepararme todos los días para ser un hombre, desde muy joven.

Yo… sobreviví, estaba en Bay Area, Oakland era salvaje. Eran los años 80, ¿sabes? ¡Fue una época increíble para vivir! Era el comienzo del hip hop, y era puro; el punk rock estaba surgiendo a la par, con estos elementos puros; y esto estaba golpeando las calles. El break dancing, era simplemente increíble. Podías tomarlo del aire y comértelo. La cultura era tan grande y tan no contaminada por la industria, el capitalismo, el corporativismo; tan sólo estaba en las calles, y sentí la vibración, sólo quería conectarme a ella y lo hice.

Creo que me ayudó. También me metí en muchos problemas. Pero creo que Bay Area es un reino mágico, es una comunidad increíble de artistas. Pensémoslo, tan sólo culturalmente, socialmente, todos conocemos la idea “libertad de expresión”, esta nació en Bay Area.

¿Conoces a los Black Panters? Eso es Bay Area. Aún los Hell’s Angels. Se trata de gente muy inquieta, si piensas en la música de Sly Stone. Santana es de aquí (México), pero él comenzó en Bay Area. Creedence Clearwater Revival, Greatful Dead, Death Kennedys, E-40, Metallica, MC Hammer, Tony! Toni! Toné! ¡Todo esto es tan ecléctico! Green Day. Toda esta música nació en este lugar y es muy diferente, no tiene como un sonido. Es de verdad ser original. Si piensas en Motown, suena a Motown; si ves a Seattle, suena a Seattle; si volteas al hip hop de LA, es el hip hop de LA. Pero Bay Area… hay algo en el agua, la gente es muy distinta, fuera de lo común. Esta comunidad me crió.

-¿Hay algo más que quisieras agregar?

-Sólo quiero decir gracias. Muchas gracias a mi gente de México. Siento tanto amor por este país, me quiero mudar. México es la última ciudad. He viajado a través de Europa, estos lugares elegantes; Tokio, Paris… pero cuando llegas a la Ciudad de México se siente como si fuera la última ciudad. Nueva York se acabó, ahora es como Disneylandia.

   

Thank you, Fantastic Negrito! You are a great artist and a wonderful human being. I feel deeply honored for sharing these words with you. All my best to your career, we need more people like you here!