Por: Estefanía Romero
En su obra titulada “Las aventuras de don Quijote en el mundo del jazz: 200 ejemplos y algunas observaciones”, el investigador español Hans Christian Hagedorn nos entrega un catálogo de distintos materiales de jazz de todo el mundo, creados entre 1925 y 2022, por compositores que se inspiraron en El Quijote o que dedican su música a la famosa novela.
Este viaje de observar/escuchar casi un siglo de música, lleva en sí el objetivo de hacernos ver el impacto que ha tenido la gran obra cervantina, y la literatura en general, en el jazz. ¡Vaya que lo logra!
Coincido con Hagedorn cuando este afirma que se le ha dado muy poca atención al jazz desde el mundo de la investigación formal; siendo que, en realidad, es de suma relevancia que analicemos el jazz no únicamente desde su estética, sino también desde la perspectiva de que este género musical se ha encargado de moldear la cultura popular occidental de los últimos años. La pregunta es ¿cómo? Y aquí es donde Hagedorn hace lo suyo…
El investigador hizo un análisis cuantitativo de 200 composiciones que él mismo recopiló, entre las cuales incluye temas de jazz y temas de otros géneros musicales, con influencias de jazz, que tienen relación con la novela cervantina. Sin embargo, el autor reflexiona que su lista, al ser de carácter global, admite la imposibilidad de tener todos los títulos de todas las composiciones de jazz en el mundo, y parte del supuesto de que la definición del jazz puede variar según la perspectiva de quienes sean más o menos puristas del género.
El autor insiste en que la mayoría (132) de las obras que él catalogó (200) pertenecen al siglo XXI, dado que es este momento de la historia en que el internet le ha permitido (¡nos permite!) acceder a una basta proporción de obras musicales de todo el planeta. Así, Hagedorn se apoyó en las clásicas plataformas de streaming musical y en sitios web especializados en música, incluyendo blogs de músicos, compositores y críticos.
Al hacer un análisis de un marco temporal tan amplio, el autor subraya un hallazgo fundamental: el interés de los compositores de jazz en la obra maestra de Cervantes, va en incremento con el tiempo. A la vez, agrega dos lapsos de ausencia del Quijote en el jazz: en las obras de jazz de los años 30 (lo que conocemos como la era del swing) no se encontraron composiciones inspiradas en la novela comentada; y en los años 40 y 50, sólo se encontraron dos piezas de dicha naturaleza. ¿Por qué? Según el autor, las razones están por explorarse.
En total, Hagedorn encontró piezas provenientes de 39 países de todos los continentes; pero, como habría de esperarse, la gran mayoría fueron creadas en Estados Unidos (56), cuna del jazz; seguidas por Francia (26), un país históricamente enamorado del jazz; y, finalmente, Gran Bretaña (22).
Tal vez nos interese saber que el autor sólo encontró 4 composiciones mexicanas inspiradas en Don Quijote. Así, el autor nombra las siguientes piezas: “Don Quijote”, de Juan García Esquivel, que aparece en el disco El sonido de Las Vegas (1969, Orfeón Videofox); así como “Rocinante” (2002), de Sergio ‘Timo’ Quintana, que, tal cual indica el investigador, nunca fue grabado en un disco, pero se encuentra en Youtube; “Las tristezas del Rocinante”, del argentino Nicolás Santella para el trío Santella Cruz Hetch (localizada en México y con un mexicano como integrante), que aparece en el disco Drunky hunky monky (2002, Urtext); y, finalmente, “Quijote”, de Matías Carbajal, que se grabó en el álbum Daydream (2017), sin sello discográfico, pero disponible en plataformas de streaming.
Hagedorn comenta al inicio de su artículo que no hace un análisis exhaustivo de cada obra; no obstante, es notorio que sí se da a la tarea de darnos una visión bastante consistente de los materiales que nos entrega. Si bien, yo misma aplaudo las obras de todos los materiales mexicanos sobre los que el español decide poner lupa, me parece revelador su apunte sobre Juan García Esquivel (la traducción está más adelante):
Juan García Esquivel (1918-2002) was a Mexican band leader, pianist, and composer. Don Quijote is a new version of his composition Pecado Mortal, which was originally recorded in 1954, with singer Antonio Prieto. Pecado Mortal also appears in Alejandro Jodorowsky’s film Cabaret Tragico (1958) and on the soundtrack album (see YouTube, Spotify, Amazon Music). Don Quijote is basically the same song as Pecado Mortal, but with a crime jazz (or TV detective show) arrangement, in a latin-inflected big-band and soul jazz setting; Esquivel used to write this kind of music while working as a staff composer for the Universal Pictures TV Division. Don Quijote was recorded with an orchestra of anonymous musicians in Mexico City in late 1968 or early 1969, and released in 1969, possibly first as a promotional single and then on the EP El sonido de Las Vegas[…] (2022, p. 127).
En español (traducción mía):
Juan García Esquivel (1918-2002) fue un mexicano líder de banda, pianista y compositor. “Don Quijote” es una nueva versión de su composición “Pecado Mortal”, que fue grabada originalmente en 1954, con el cantante Antonio Prieto. “Pecado Mortal” también aparece en el filme Cabaret Trágico (1958) de Alejandro Jodorowsky, y en su banda sonora (ver YouTube, Spotify, Amazon Music). “Don Quijote” es básicamente la misma canción que “Pecado Mortal”, pero con un arreglo de crimen de jazz (o de show de detectives de televisión), sobre un escenario de soul jazz y de big band influenciada con música latina. Esquivel solía escribir este tipo de música mientras trabajaba como compositor de staff para la división de TV, de Universal Pictures. “Don Quijote” fue grabado con una orquesta de músicos anónimos, en la ciudad de México a finales de 1968 o principios de 1969, y lanzado en 1969, posiblemente primero como un sencillo promocional y después en el EP El Sonido de Las Vegas[…]
En el caso general de América Latina, es Brasil el país que sobresalió por su consumo, comprensión y apreciación de personajes y episodios que ocurren en la obra cervantina, dada la mayoría de obras jazzísticas con enfoque en esta misma.
El autor señala que dentro de los artistas que han dado vida a estas obras, encontramos a varios de los icónicos en la historia del jazz; si bien, su lista es amplia, me saltan a la vista algunos de los que yo he amado, como Michel Legrand, Henry Mancini, John McLaughlin, Bill Evans, George Benson, Horace Silver, Dizzy Gillespie y muchos más… catalogados y ordenados de manera apropiada por el mismo autor.
Otro de los puntos que quiero resaltar es que, en su catálogo final, Hagedorn encontró más piezas instrumentales que canciones y, aunque no me extenderé ya más (porque no quiero seguir spoileando), comentaré que Hagedorn me voló la mente cuando comentó que la presencia de Don Quijote en un siglo de jazz es similar a la que existe de música clásica en los últimos 400 años. Si nos ponemos a pensar, tiene lógica: el jazz llegó a un mundo donde las comunicaciones le permitieron evolucionar prácticamente en cada salto de década.
En fin, este estudio nos expone diversos ángulos nuevos de conexión entre la literatura clásica y el jazz, proponiendo con ello otra forma de ver, sentir y entender tanto el arte, como lo que conforma nuestros imaginarios a partir de todo aquello.
Te invito a que leas la obra de Hagedorn y de maravilles con todas estas posibilidades.
A la vez, me uno a la moción del investigador cuando este espera que su obra abra las puertas a futuras investigaciones sobre la recepción de otros trabajos literarios en el jazz.
Bibliografía:
Hagedorn, Hans Christian. 2022. “Don Quixote’s Adventures in the World of Jazz: 200 Examples and a Few Remarks”. Anales Cervantinos 54: 101-173. https://doi.org/10.3989/anacervantinos.2022.005